La Champions está de vuelta y hoy espera un gran partido. Madrid-Liverpool, dos clásicos, grandes campeones de Europa y quien gane saldrá resucitado para aspirar a todo en lo que queda de competición. El Liverpool ya lo conocemos todos con una de las mejores "columna vertebral" que se puede ver en la actualidad; Reina, Carragher, Mascherano, Alonso, Gerrard, Torres. Equipo completo y con jugadores que marcan la diferencia, Benítez no acaba de aprender la lección y sigue con las rotaciones bajando el nivel varios puntos en cada partido.
El Madrid, veremos si juega Sneijder y vuelve ese 4-3-3 asimétrico dejando la banda izquierda libre con Robben de extremo derecho y Sneijder de mediapunta por delante de Raúl e Higuain. Toda la banda para Heinze, Kuyt hace desmarques a la espalda y Gerrard ocupa el espacio vacio haciendo la diagonal hacia dentro desde la derecha. Si Lass no está acertado y Ramos no cierra bien su lateral, la conexión Gerrard-Torres partiendo en pase diagonal desde la banda derecha del capitán "red" a la entrada de "The Kid" a la espalda de Sergio Ramos puede hacer mucho daño al Madrid. En fase ofensiva blanca, Mascherano se encarga de Sneijder, 2x2 centrales vs delanteros y Alonso, Gerrard, Kuyt y Riera con superioridad en el centro del campo. A día de hoy, el holandés no marca las diferencias como para poder permitirse ser el punto de partida de la asimetría.
Pero el artículo de hoy no es una previa del partido. Es un anticipo del duelo Torres vs Raúl, el día del capitán blanco que sueña con este partido desde que la eliminatoria caprichosa juntó pasado con presente. Llega en su mejor momento, en estado de gracia y lo que toca va dentro. Torres no acaba de coger la forma pero empieza a arrancar. La porteria del Bernabeu se le hace pequeña y Casillas le tiene comida la moral, el primer mano a mano decidirá su partido. Jugará con confianza porque se siente mejor jugador que cuando estaba en el Atleti. Desde la última que ha jugado en el Bernabeu todo ha cambiado. Ahora es campeón de Europa y juega en un equipo sin complejos.
Si lo falla, vuelven los fantasmas del pasado, la porteria se vuelve pequeña y Casillas muy grande. Es un duelo mental, Torres contra Torres y en el camino Pepe y Casillas. No creo que sea su día.
Nada de esto va con Raúl. Voluntad y profesionalidad suplen sus evidentes carencias pero su autoconfianza y su poderío mental le hacen indispensable en este tipo de partidos.
Ofensivamente, si el Madrid quiere ganar el partido, la llave la tiene Raúl. El automatismo que Juande debía ensayar hasta hoy es un automatismo trampa. Focalizar la fase ofensiva en Robben para que el 7 se beneficie de ello dando por seguro que Arbeloa hará un marcaje al hombre al holandés.
Posesión para el Madrid iniciando Sergio Ramos, Robben tirado a la izquierda, hace un desmarque para llevarse Arbeloa y entonces aparece Raúl, diagonal hacia dentro desde la izquierda buscando el espacio vacio. El único problema es que está obligado a controlar el balón antes de que bote porque todos sabemos que la velocidad no es su fuerte. El Madrid tiene que jugar haciendo aclarados ofensivos para destrozar una compacta defensa no tan potente como algunos creen.
Dominan el juego de basculación y tienen la paciencia adecuada, apenas cometen errores, pero si juegas directo, vertical, con un plan y sin balones horizontales, llega el fallo porque la élite está en Carragher y Skrtl pero incluso el inglés no llega en gran momento. Arbeloa es diferencial en la marca al hombre, pero eso obliga a una defensa de 3 y hace indispensable a Mascherano en las ayudas. Mucha variante para parar a Robben. Higüain y Raúl contra un marcaje zonal que orienta sus movimientos al holandés. Higüain tiene que buscar la banda, recibir para buscar el centro y llevarse a uno de los centrales. Robben "jugar" con Arbeloa, estar 20 min. sin buscar un solo desmarque de ruptura, llevárselo para el mediocampo, recibir al pie y cuando se inicie por banda contraria quedarse quieto y que sea Raúl el que haga el desmarque al espacio libre. Si 2x1 al que marca al hombre y si Arbeloa busca al capitán, balón a Robben que empieza conducción en 3/4 de campo con Sneijder, Raúl e Higüain por delante.
Hoy es el día de Raúl, si alguien marca en el Madrid, será él y eso que en su duelo con los centrales tiene todas las de perder salvo que Benitez apueste por Hyppia como central titular desplazando a Carragher al lateral derecho para poder poner a Arbeloa en la izquierda marcando a Robben. Entonces, mezclas a Higüain con el central, mucho más veloz el argentino y Raúl buscandole la espalda, el 2x1 contra un central para que si el otro central entra al juego, espacio vacio para Sneijder. La única ventaja de jugar con mediapunta y dos puntas es la superioridad en la zona central ofensiva. No descarto que si juega Hyppia veamos a Raúl unos metros por detrás, con el Pipita como único nueve y Robben haciendo desmarques de ruptura. El capitán llegando por sorpresa, sin tener que fijar a la defensa porque en el 1x1 está perdido.
Por último el duelo Torres-Pepe. Dos portentos de la naturaleza frente a frente. La clave ofensiva del Liverpool tiene que ser insistir, juntar mucho a Torres con Pepe aunque tenga las de perder, para poder así estirar el equipo, que Pepe recule y que Gerrard ocupe el espacio. La clave del Liverpool hoy no es Torres, es Kuyt + Gerrard. Ahí tendrán el partido y a día de hoy tienen más y mejores variantes que el Madrid si juega Riera buscando la espalda de Ramos y la llegada en segundo palo desde banda contrario.
Torres será hoy "esclavo" de Gerrard. Es típico de Benítez utilizar a alguna de sus estrellas como jugador "trampa" haciendo un trabajo perjudicial desde el punto de vista individual pero que tiene grandes beneficios colectivos. Hoy le toca al Niño, en el día que vuelve a España para consolidarse, pero si Gerrard marca hoy uno, habrá cumplido el español.
Si hoy marca Raúl y Torres juega mal, volverá el debate Raúl selección. No se dejen engañar porque Villa y Torres están un escalón por encima, no hay duda. Y el tercer mejor delantero español es Raúl de manera indiscutible también, pero no encaja en el perfil, no ofrece nada nuevo y ralentiza el rápido juego de la selección que necesita como tercer hombre a Llorente con buen juego aéreo y calidad en el juego de espaldas.
miércoles, 25 de febrero de 2009
domingo, 8 de febrero de 2009
Mercado de Invierno, otro suspenso más...
El mercado de Invierno es para el que no hace los deberes en Verano, así que era de esperar que el Madrid buscase soluciones en forma de parches para estas fechas. Viendo la plantilla y obligados por las lesiones de M. Diarrá y Van Nistelrooy, hacían falta un mediocentro de perfil defensivo, un delantero centro y un extremo. Además, un lateral izquierdo de buen rendimiento hubiera subido el nivel medio del equipo, pero las prioridades estaban hechas.
El Madrid cerró la contratación de Huntelaar como el delantero deseado. Sería demasiado repetitivo volver a reincidir en la "euro chapuza", pero en términos futbolísticos, tampoco era el idoneo.
El delantero holandés no es un mal jugador. Pocos como él en el remate de primeras, buen jugador de área, potente disparo y correcto lanzador de faltas. Un finalizador de primer toque con buena definición, de los que buscan el pase a la red.
El problema es que llega al sitio equivocado, a un equipo que no va a explotar sus virtudes sino que va a acentuar sus defectos. No tiene velocidad, no es bueno en el uno contra uno, su juego de espaldas no marca diferencias y fuera del área no aporta nada.
El Madrid, un equipo sin fútbol, que produce muy poco y que juega atrás, esperando el contragolpe necesita algo más que un finalizador. Necesita un jugador que no depende del equipo y que tenga capacidad de crear por si mismo y rematar a gol. Velocidad, desborde y definición son las tres pautas que había que seguir para escoger. Un jugador que busque la espalda de los laterales, arranque y dispare. Sólo dos jugadores en el mercado con un nivel Real Madrid. Zárate, del Lazio y Oliveira del Zaragoza. El segundo no ha jugado UEFA por lo tanto está disponible para la Champions. Su precio, 10 millones de euros. La comparativa con Huntelaar en calidad, precio y necesidad es odiosa.
De un plumazo, ya tienes gol y un jugador que encaja por igual en el 4-3-3 y en el 4-4-2 junto a Higüain. Ahora necesitas robar el balón, un mediocentro defensivo apto. El jugador, Lassane Diarrá.
Es un fichaje acertado. Polivalente, juega en todas las posiciones del centro del campo, se adapta a ambos sistemas y puede jugar como lateral. Viene con la intensidad Premier y seguramente no será el mismo jugador a final de temporada, más adaptado y también, inconscientemente, más acomodado. Tiene que jugar mucho y entrenar poco hasta final de temporada. Exprimirlo si quieres rendimiento.
Ya tienes dos jugadores que suben el nivel en Champions. Fuerza en el centro del campo y gol en la delantera. Suma una defensa competente con Casillas, Ramos, Pepe, Cannavaro y Torres y el arma letal Robben. Con la plantilla que tienes, si te fijas en una sola competición, necesitas cuidar al holandés, que llegue al máximo y fresco. No tienes otro extremo.
El Madrid apuesta por Faubert, gran error. Disparo impreciso, centro demasiado poco tocadito, difícil de rematar... y más en esta plantilla, malo en el desborde. Un jugador del montón que abre campo y poco más. Nivel de equipo de mitad de tabla de primera división y hemos visto mucho mejores. Puede jugar la Champions justifican alguno, pero no lo hará porque es jugar con uno menos y tampoco tiene el nivel para ser titular en Liga. Has fichado un suplente y Robben sigue obligado a jugar todo.
El jugador era Quaresma, cedido al Chelsea. No puede jugar Champions, pero eso no es un problema en un jugador con desborde, centro, velocidad y disparo. La rotación perfecta para Robben y un equipo que sería de garantías sin el holandés en las semanas de Champions-Liga, Miércoles-Sábado. Con Quaresma, Robben puede jugar de aquí a final de temporada con 7 días entre partido y partido. El partido de Liga antes del Madrid-Liverpool juega Quaresma los noventa minutos y das descanso a Robben y a Higuain (juegas con Raúl-Oliveira). Partido de Champions, 90 minutos para Robben después de 10 días sin partido de máxima competición. Sábado siguiente, otra vez, descanso para Robben, titularidad para Quaresma. Descanso para Oliveira y Raúl-Higüain arriba.
No puede jugar Champions, pero el portugués también tiene su aportación en Copa de Europa con una invisible rotación para Arjen Robben.
Todo orientado a los octavos contra el Liverpool, pero hay serias posibilidades de que el Barça gane al Lyon y el Madrid pierda en anfield. Un Barça cargado de partidos y de distracciones, con una final de Copa, partidos Miércoles-Sábado de máxima tensión en Champions... Un solo pinchazo, a 9, la prensa habla del milagro blanco, de la Liga de Capello, la presión se enciende..."y fútbol es fútbol". 7 días de descanso entre partido y partido y un equipo con Casillas, Ramos, Pepe, Cannavaro, Torres, Gago, Lass, Sneijder y una delantera espectacular con Quaresma, Robben y Oliveira o el Pipita Higuain.
A cambio de esto, tienes dos suplentes. Faubert y Huntelaar. El primero no tiene nivel Real Madrid y el segundo no encaja en la forma de jugar del equipo y no puede jugar la Champions.
El verano que viene para el Madrid volverá a ser un verano duro. Fichas altas, demasiada plantilla, nadie acaba contrato... Y unas elecciones al final del túnel.
El Madrid cerró la contratación de Huntelaar como el delantero deseado. Sería demasiado repetitivo volver a reincidir en la "euro chapuza", pero en términos futbolísticos, tampoco era el idoneo.
El delantero holandés no es un mal jugador. Pocos como él en el remate de primeras, buen jugador de área, potente disparo y correcto lanzador de faltas. Un finalizador de primer toque con buena definición, de los que buscan el pase a la red.
El problema es que llega al sitio equivocado, a un equipo que no va a explotar sus virtudes sino que va a acentuar sus defectos. No tiene velocidad, no es bueno en el uno contra uno, su juego de espaldas no marca diferencias y fuera del área no aporta nada.
El Madrid, un equipo sin fútbol, que produce muy poco y que juega atrás, esperando el contragolpe necesita algo más que un finalizador. Necesita un jugador que no depende del equipo y que tenga capacidad de crear por si mismo y rematar a gol. Velocidad, desborde y definición son las tres pautas que había que seguir para escoger. Un jugador que busque la espalda de los laterales, arranque y dispare. Sólo dos jugadores en el mercado con un nivel Real Madrid. Zárate, del Lazio y Oliveira del Zaragoza. El segundo no ha jugado UEFA por lo tanto está disponible para la Champions. Su precio, 10 millones de euros. La comparativa con Huntelaar en calidad, precio y necesidad es odiosa.
De un plumazo, ya tienes gol y un jugador que encaja por igual en el 4-3-3 y en el 4-4-2 junto a Higüain. Ahora necesitas robar el balón, un mediocentro defensivo apto. El jugador, Lassane Diarrá.
Es un fichaje acertado. Polivalente, juega en todas las posiciones del centro del campo, se adapta a ambos sistemas y puede jugar como lateral. Viene con la intensidad Premier y seguramente no será el mismo jugador a final de temporada, más adaptado y también, inconscientemente, más acomodado. Tiene que jugar mucho y entrenar poco hasta final de temporada. Exprimirlo si quieres rendimiento.
Ya tienes dos jugadores que suben el nivel en Champions. Fuerza en el centro del campo y gol en la delantera. Suma una defensa competente con Casillas, Ramos, Pepe, Cannavaro y Torres y el arma letal Robben. Con la plantilla que tienes, si te fijas en una sola competición, necesitas cuidar al holandés, que llegue al máximo y fresco. No tienes otro extremo.
El Madrid apuesta por Faubert, gran error. Disparo impreciso, centro demasiado poco tocadito, difícil de rematar... y más en esta plantilla, malo en el desborde. Un jugador del montón que abre campo y poco más. Nivel de equipo de mitad de tabla de primera división y hemos visto mucho mejores. Puede jugar la Champions justifican alguno, pero no lo hará porque es jugar con uno menos y tampoco tiene el nivel para ser titular en Liga. Has fichado un suplente y Robben sigue obligado a jugar todo.
El jugador era Quaresma, cedido al Chelsea. No puede jugar Champions, pero eso no es un problema en un jugador con desborde, centro, velocidad y disparo. La rotación perfecta para Robben y un equipo que sería de garantías sin el holandés en las semanas de Champions-Liga, Miércoles-Sábado. Con Quaresma, Robben puede jugar de aquí a final de temporada con 7 días entre partido y partido. El partido de Liga antes del Madrid-Liverpool juega Quaresma los noventa minutos y das descanso a Robben y a Higuain (juegas con Raúl-Oliveira). Partido de Champions, 90 minutos para Robben después de 10 días sin partido de máxima competición. Sábado siguiente, otra vez, descanso para Robben, titularidad para Quaresma. Descanso para Oliveira y Raúl-Higüain arriba.
No puede jugar Champions, pero el portugués también tiene su aportación en Copa de Europa con una invisible rotación para Arjen Robben.
Todo orientado a los octavos contra el Liverpool, pero hay serias posibilidades de que el Barça gane al Lyon y el Madrid pierda en anfield. Un Barça cargado de partidos y de distracciones, con una final de Copa, partidos Miércoles-Sábado de máxima tensión en Champions... Un solo pinchazo, a 9, la prensa habla del milagro blanco, de la Liga de Capello, la presión se enciende..."y fútbol es fútbol". 7 días de descanso entre partido y partido y un equipo con Casillas, Ramos, Pepe, Cannavaro, Torres, Gago, Lass, Sneijder y una delantera espectacular con Quaresma, Robben y Oliveira o el Pipita Higuain.
A cambio de esto, tienes dos suplentes. Faubert y Huntelaar. El primero no tiene nivel Real Madrid y el segundo no encaja en la forma de jugar del equipo y no puede jugar la Champions.
El verano que viene para el Madrid volverá a ser un verano duro. Fichas altas, demasiada plantilla, nadie acaba contrato... Y unas elecciones al final del túnel.
sábado, 7 de febrero de 2009
Drogba y un equipo de Champions
Hay muchas formas de jugar al fútbol, pero el rendimiento de un equipo no es exclusivamente la elección de un buen once y un sistema adecuado. Todo empieza mucho antes con una planificación de plantilla que concuerde con el estilo de juego que quieras imponer y una calidad de entrenamientos con una gran carga de transferencia entre el trabajo semanal y el partido. Las claves del éxito son trabajo y rigor. Saber delegar y tener una profesionalidad en todas las áreas del club. Red de Scouting, secretaría técnica, cuerpo técnico, etc.
En lo puramente futbolístico, hay estilos y estilos, todos muy respetables y ninguno igual que el otro. Cada equipo es único. El entrenador cuando quiere iniciar un proyecto debe visualizar que equipo quiere ver sobre el campo, como quiere jugar. Y a partir de ahí, rigor y calidad en los fichajes y el trabajo semanal con todo lo que esto abarca (estudio del rival, motivación, entrenamientos). El error de Scolari, hombre consolidado como seleccionador es que no parece saber que Chelsea quiere, a veces en el fútbol, el término medio no es lo más adecuado.
En el campo, un equipo difícil de ganar es el que domina la presión, asfixia al rival, todos los rechaces son para el mismo equipo, el rival tiene que pensar rápido y mal porque sabe que la va a perder, que se le van a echar encima y entonces entra la desconfianza. A partir de ahí y con balón, hay que exigir al rival a que haga movimientos explosivos, atacar muy rápido porque el jugador que defiende inmediatamente después de estar atacando no ha cambiado el chip por completo.
Presión y ocupación racional del espacio. Hay buenos equipos que hacen lo primero, otros lo segundo, el éxito está en la combinación de ambas cosas. Ser amo y señor del terreno de juego, todos los espacios ocupados, superioridad en todas las zonas o jugadores corpulentos que salgan siempre ganando en el 1x1.
Robas, robas y vuelves a robar y el rival se va metiendo cada vez más atrás porque sale con un pelotazo, balón para tus centrales y dominas el partido aunque no tengas largas posesiones. Con balón, hay que tener ideas, saber que hacer, buenos desmarques, buenos desplazamientos y abrir a banda o buscar el pase raso vertical que rompa una línea.
Llevas el juego a la banda y tus defensas dan otro paso hacia delante embotellando al rival porque sencillamente eres superior a ellos. El extremo tiene un apoyo de cara con el lateral, otro por el centro con uno de los mediapuntas, puede encarar porque el rival no llega a las coberturas víctima del cansancio o centrar al área donde se encuentran entre tres y cuatro jugadores. Si te roban, presión iniciada con el jugador más cercano al balón y repliegue en forma de embudo en la zona defensiva, regalando los espacios por banda donde los extremos tapan línea de pase y si no consiguen interceptar, la defensa inicia basculación con los 4 jugadores bien colocados y la ayuda de un mediocentro defensivo.
La presión defensiva a lo ancho y no a lo largo porque si no, cada vez que el adversario sale por banda, los interiores hacen un gran desgaste muchas veces inefectivo y porque con una buena circulación del rival, robas demasiado atrás. El mejor sistema para llevar a cabo todo lo dicho, un 4-1-4-1.
Jugadores contundentes en defensa con laterales que tengan calidad en el juego de centro y remate y gran ida y vuelta. Extremos explosivos y que puedan jugar a banda cambiada y haciendo la diagonal, un mediocentro defensivo con un desgaste físico que marque las diferencias y dos mediaspuntas que empujen al equipo, roben balones, jueguen cerca del área, se incorporen al remate y tengan gol. El delantero centro, juego de espaldas y velocidad al espacio.
A partir de ahí, un buen lanzador de acciones a balón parado entre los seleccionados y tienes un once muy completo que por supuesto hay que rellenar con distintos perfiles y fiables sustitutos.
No estoy descubriendo nada, solo visualizo que haría si fuera entrenador del Chelsea. Eso es lo que quiero, pero eso no es nada. A partir de ahí, el trabajo duro; transformar la idea en realidad con entrenamientos con gran carga de asimilación táctica y un trabajo siempre orientado al objetivo de ser lo que quieres ser.
"SORPRESA, DROGBA "INTERIOR" "
El Chelsea, si quiere presionar a lo ancho y no a lo largo, no se puede permitir jugar con dos puntas. Así ganaría muchos más partidos Premier por las individualidades, pero perdería competitividad porque el centro del campo o pierde el juego por bandas o tiene inferioridad por el centro y se vuelve frágil. Lampard, Ballack, Deco... demasiada artilleria y muy poco rendimiento en un 4-4-2.
Entonces, ¿Anelka o Drogba? Ambos delanteros, pero ofrecen cosas distintas.
Si visualizas un Chelsea ganador visualizas un equipo que entra con muchos jugadores al remate, que presiona muy arriba y que necesita que la línea por detrás del punta tenga gol.
La sorpresa, Drogba titular en la línea de 4 por detrás del punta. Corpulento, gran sacrificio y buenas nociones tácticas. Su trabajo sin balón, presionar al hombre en zona al mediocentro rival que busca recibir de los centrales para sacar el balón. Si roba, se encuentra cerca de la porteria con su potente disparo. Normalmente, el rival sale por banda. Cuando el equipo roba, un automatismo ofensivo que daría victorias sin desgaste al Chelsea. El extremo llama la atención del rival, mantiene la posesión y amaga con encarar. Apoyo de Cole en un lado o Bosingwa en el otro, pase atrás y éstos, libres de marca, centran al área. Allí, Anelka, Lampard, Drogba y el extremo de banda contrario.
UN EQUIPO CASI "PERFECTO"
Cech; Bosingwa-Terry-Carvahlo-Cole; Mikel; Essien-Lampard-Drogba-Quaresma (Kalou, Malouda...); Anelka.
No hablamos hoy de que es jugar bien o bonito, hablamos de tener un estilo de juego que concuerde con tus jugadores buscando así el máximo rendimiento y la competitividad. Un equipo que busca la fuerza, robar, jugar vertical, machacar al rival y exigir a todos los rivales haciendoles sentirse incómodos tiene en el Chelsea su posible máximo exponente. Pongo un once, no tiene que ser el titular. Hay lesionados, también está Ballack, está Deco, el rendimiento de Quaresma es una incógnita pero bien trabajado el Chelsea es aspirante total a Champions.
Hasta entonces, muchas cosas mejorables. Los jugadores tienen excesivos fallos individuales, muchos de concentración, otros en los que se ve una deteriorada forma física, el músculo no reacciona a la velocidad de la cabeza y las ejecuciones son lentas.
En ataque, no hay ideas ni automatismos, no se saca el máximo rendimiento de los jugadores porque no se sigue una línea coherente en la fase ofensiva.
En defensa, fragilidad porque la defensa juega muy adelantada y la presión no es excesivamente fuerte y efectiva.
En lo puramente futbolístico, hay estilos y estilos, todos muy respetables y ninguno igual que el otro. Cada equipo es único. El entrenador cuando quiere iniciar un proyecto debe visualizar que equipo quiere ver sobre el campo, como quiere jugar. Y a partir de ahí, rigor y calidad en los fichajes y el trabajo semanal con todo lo que esto abarca (estudio del rival, motivación, entrenamientos). El error de Scolari, hombre consolidado como seleccionador es que no parece saber que Chelsea quiere, a veces en el fútbol, el término medio no es lo más adecuado.
En el campo, un equipo difícil de ganar es el que domina la presión, asfixia al rival, todos los rechaces son para el mismo equipo, el rival tiene que pensar rápido y mal porque sabe que la va a perder, que se le van a echar encima y entonces entra la desconfianza. A partir de ahí y con balón, hay que exigir al rival a que haga movimientos explosivos, atacar muy rápido porque el jugador que defiende inmediatamente después de estar atacando no ha cambiado el chip por completo.
Presión y ocupación racional del espacio. Hay buenos equipos que hacen lo primero, otros lo segundo, el éxito está en la combinación de ambas cosas. Ser amo y señor del terreno de juego, todos los espacios ocupados, superioridad en todas las zonas o jugadores corpulentos que salgan siempre ganando en el 1x1.
Robas, robas y vuelves a robar y el rival se va metiendo cada vez más atrás porque sale con un pelotazo, balón para tus centrales y dominas el partido aunque no tengas largas posesiones. Con balón, hay que tener ideas, saber que hacer, buenos desmarques, buenos desplazamientos y abrir a banda o buscar el pase raso vertical que rompa una línea.
Llevas el juego a la banda y tus defensas dan otro paso hacia delante embotellando al rival porque sencillamente eres superior a ellos. El extremo tiene un apoyo de cara con el lateral, otro por el centro con uno de los mediapuntas, puede encarar porque el rival no llega a las coberturas víctima del cansancio o centrar al área donde se encuentran entre tres y cuatro jugadores. Si te roban, presión iniciada con el jugador más cercano al balón y repliegue en forma de embudo en la zona defensiva, regalando los espacios por banda donde los extremos tapan línea de pase y si no consiguen interceptar, la defensa inicia basculación con los 4 jugadores bien colocados y la ayuda de un mediocentro defensivo.
La presión defensiva a lo ancho y no a lo largo porque si no, cada vez que el adversario sale por banda, los interiores hacen un gran desgaste muchas veces inefectivo y porque con una buena circulación del rival, robas demasiado atrás. El mejor sistema para llevar a cabo todo lo dicho, un 4-1-4-1.
Jugadores contundentes en defensa con laterales que tengan calidad en el juego de centro y remate y gran ida y vuelta. Extremos explosivos y que puedan jugar a banda cambiada y haciendo la diagonal, un mediocentro defensivo con un desgaste físico que marque las diferencias y dos mediaspuntas que empujen al equipo, roben balones, jueguen cerca del área, se incorporen al remate y tengan gol. El delantero centro, juego de espaldas y velocidad al espacio.
A partir de ahí, un buen lanzador de acciones a balón parado entre los seleccionados y tienes un once muy completo que por supuesto hay que rellenar con distintos perfiles y fiables sustitutos.
No estoy descubriendo nada, solo visualizo que haría si fuera entrenador del Chelsea. Eso es lo que quiero, pero eso no es nada. A partir de ahí, el trabajo duro; transformar la idea en realidad con entrenamientos con gran carga de asimilación táctica y un trabajo siempre orientado al objetivo de ser lo que quieres ser.
"SORPRESA, DROGBA "INTERIOR" "
El Chelsea, si quiere presionar a lo ancho y no a lo largo, no se puede permitir jugar con dos puntas. Así ganaría muchos más partidos Premier por las individualidades, pero perdería competitividad porque el centro del campo o pierde el juego por bandas o tiene inferioridad por el centro y se vuelve frágil. Lampard, Ballack, Deco... demasiada artilleria y muy poco rendimiento en un 4-4-2.
Entonces, ¿Anelka o Drogba? Ambos delanteros, pero ofrecen cosas distintas.
Si visualizas un Chelsea ganador visualizas un equipo que entra con muchos jugadores al remate, que presiona muy arriba y que necesita que la línea por detrás del punta tenga gol.
La sorpresa, Drogba titular en la línea de 4 por detrás del punta. Corpulento, gran sacrificio y buenas nociones tácticas. Su trabajo sin balón, presionar al hombre en zona al mediocentro rival que busca recibir de los centrales para sacar el balón. Si roba, se encuentra cerca de la porteria con su potente disparo. Normalmente, el rival sale por banda. Cuando el equipo roba, un automatismo ofensivo que daría victorias sin desgaste al Chelsea. El extremo llama la atención del rival, mantiene la posesión y amaga con encarar. Apoyo de Cole en un lado o Bosingwa en el otro, pase atrás y éstos, libres de marca, centran al área. Allí, Anelka, Lampard, Drogba y el extremo de banda contrario.
UN EQUIPO CASI "PERFECTO"
Cech; Bosingwa-Terry-Carvahlo-Cole; Mikel; Essien-Lampard-Drogba-Quaresma (Kalou, Malouda...); Anelka.
No hablamos hoy de que es jugar bien o bonito, hablamos de tener un estilo de juego que concuerde con tus jugadores buscando así el máximo rendimiento y la competitividad. Un equipo que busca la fuerza, robar, jugar vertical, machacar al rival y exigir a todos los rivales haciendoles sentirse incómodos tiene en el Chelsea su posible máximo exponente. Pongo un once, no tiene que ser el titular. Hay lesionados, también está Ballack, está Deco, el rendimiento de Quaresma es una incógnita pero bien trabajado el Chelsea es aspirante total a Champions.
Hasta entonces, muchas cosas mejorables. Los jugadores tienen excesivos fallos individuales, muchos de concentración, otros en los que se ve una deteriorada forma física, el músculo no reacciona a la velocidad de la cabeza y las ejecuciones son lentas.
En ataque, no hay ideas ni automatismos, no se saca el máximo rendimiento de los jugadores porque no se sigue una línea coherente en la fase ofensiva.
En defensa, fragilidad porque la defensa juega muy adelantada y la presión no es excesivamente fuerte y efectiva.
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