sábado, 7 de marzo de 2009

Automatismo ofensivo, "el cebo Guti"

Real Madrid-Atlético de Madrid, primera piedra en el camino del equipo blanco que empieza así su semana más dura en lo que queda de año. Un rival que llega con la moral alta y que tiene individualidades para romper los partidos, pero no hay que engañarse porque el Atlético es sinónimo de distancia entre líneas, caos táctico y base física-psicológica bastantee deficiente. Los jugadores no tienen un plan para parar al Madrid, los centrales no saben si seguir el desmarque hacia dentro de Raúl o quedar en zona, Maniche no es jugador de coberturas a quien marca al hombre...

El Madrid, por contra, sabe lo que se espera. Atlético de Madrid, 4-4-2, y los 4 de arriba que presionan la primera línea, emparejandose cada jugador suyo con cada defensa del Madrid tapando línea de pase, los puntas con los centrocampistas y los extremos con los jugadores de banda del Madrid. Además, previsible marcaje al hombre de Assunçao a Guti, seguramente aquí estará el partido. Si el Madrid cae en la trampa, Guti baja a recibir, busca el balón de espaldas, perderá balones en el centro del campo, con el equipo desplegándose y el Atleti con Agüero, Forlán, Simao y Maxi por delante de la línea del balón.

Si el Madrid juega 4-4-2 el Atleti puede hacer daño, emparejándose casi al hombre sin balón, los 4 de arriba con los 4 defensas, los 2 del centro con los dos mediocentros que van a recibir el balón, los laterales con los extremos del Madrid y los centrales con los puntas. El Madrid sin Pepe, poca salida limpia de balón, una pérdida es letal, si el Atleti sale ambicioso puede hacer daño.

La obsesión del Atleti es el "14". Abel sabe que su defensa está en fase de aprendizaje y que la transición será dura porque ni hay nivel ni hay características para ser optimistas en ese apartado. Los pases entre líneas matarán al Atleti, pero Guti no está bien aunque la prensa hable de exhibición en Montjuic. Marcó una falta y decidió el partido pero ahí acabó todo. No está en forma, juega andando, no encuentra su posición y no marca los tiempos, ese es Guti hasta ahora desde su lesión.

Mi opción si fuera Juande, 4-3-3, casi un 4-5-1 con el Pipita Higuain tirado a la izquierda y Robben a la derecha.
La alineación Ramos, Cannavaro, Heinze, Marcelo; Guti, Gago, Lass; Robben, Higuain; Raúl.

La clave está en llenar de dudas a un Atleti en fase de automatización táctica, un equipo que aun no cree en lo que hace. Trivote casi en línea, Guti de interior derecho, Gago en el vertice, Lass de interior izquierdo. Salida de balón por Sergio Ramos, Guti arrastra a Paulo Assunçao haciendo un desmarque de ruptura y alejándose del balón pero siempre siendo posible recibirlo si nadie tapa la línea de pase. Entonces, si Maniche busca la cobertura en banda para ayudar a Assunçao, el centro del campo es del Madrid, si el portugués cierra correctamente, 2x1, Gago-Lass que van a recibir como si de un doble pivote se tratara. La distancia entre Maniche y los centrales entonces aumenta, Raúl el punta cae entre líneas, si la defensa marca en zona y no le siguen, recibe balón directo de Ramos o pasando por Gago y tiene a Guti, Robben e Higüain, 4x4 con la defensa. Si por contra, un central sigue a Raúl cuando hace el arrastre hacia el centro del campo, Higüain y Robben buscan el desmarque de ruptura diagonal hacia dentro contra una defensa adelantada llena de jugadores más lentos que ellos. Robben marcando diferencias, muchos metros para correr al espacio, como en sus tiempos con Mourinho.

Guti, el jugador estrella, el teórico 10, usado como jugador trampa, para que el Atléti se descomponga. Táctica Benítez, despreciar el rendimiento individual en beneficio del colectivo.